Tutorial para soportar a tu jefe
El viernes se festeja en U.S.A. el Día Nacional del Jefe, mas para los empleados que no se les pasa por la cabeza celebrar ese día la solución puede estar en el libro 'Working for You Isn't Working for Me' ('Trabajar para ti no marcha para mí').
Esta obra, subtitulada 'The Ultimate Guide to Managing Your Boss' ("Guía esencial para lidiar con tu jefe") es un manual que busca asistir a los trabajadores a subsistir a jefes tan bien difíciles como el jamás satisfecho "crítico crónico" o bien el "socavador", en el que no se puede confiar.
En una economía desgastada como la de ahora, entre los tipos más habituales es el jefe "supervisor" que desea aprobar cada resolución, afirmó Katherine Crowley, la psicoterapeuta que escribió el libro al lado de Kathi Elster, su asociada en una asesora de la ciudad de Nueva York.
"Esa conducta, de administración exageradamente aprensiva, es común bajo la tensión. Ellos están horrorizados de cometer un fallo por el hecho de que no desean que pase nada que no sepan", afirmó Crowley a Reuters en una entrevista.
Asimismo está el jefe "que lo afirma todo" (que precisa siempre y cuando alguien lo escuche), el jefe "ido" (al que le importa poco el trabajo) y, asimismo común en los tiempos bien difíciles, el jefe "que cambia la reglas" (aquel altera sus ordenes y esperanzas por capricho).
"En instantes de tensión, un jefe titubeante se vuelve más titubeante. Vemos mucho de eso ahora", afirmó Crowley, quien escribió anteriormente con Elster 'Working With You Is Killing Me' ('Trabajar para ti me está matando').
Los lectores reciben formas de valorar qué género de empleados son, como un "autor" o bien un "observador", modelos basados en de qué manera reaccionan y de qué forma lidian con múltiples géneros de jefes. "No creo que absolutamente nadie verdaderamente lo haya analizado de esta forma. Verdaderamente deseábamos decir, 'Eseperen, la gente lleva su bagaje sensible al trabajo'", afirmó Elster.
"Dejad de inculpar siempre y en todo momento a el resto. Cuando comprenden sus necesidades, esperanzas y miedos, verdaderamente van a poder trabajar mejor con bastante gente diferente. No con todos, mas sí de una mejor forma", añadió.
Las autoras inventaron 4 pasos para solucionar un inconveniente con un jefe irritado: advertirlo, alejarse de él, despersonalizarlo, y manejarlo. Alejarse de él probablemente sea lo más bien difícil, afirmó Crowley.
"Cuando se tiene una situación bien difícil, hay algo en la naturaleza humana que nos lleva a solventarlo, a trabajar más duro sobre eso", aclaró Crowley. "Alejarse de ello es sobre tomar distancia sensible de la situación", añadió.
Esta obra, subtitulada 'The Ultimate Guide to Managing Your Boss' ("Guía esencial para lidiar con tu jefe") es un manual que busca asistir a los trabajadores a subsistir a jefes tan bien difíciles como el jamás satisfecho "crítico crónico" o bien el "socavador", en el que no se puede confiar.
En una economía desgastada como la de ahora, entre los tipos más habituales es el jefe "supervisor" que desea aprobar cada resolución, afirmó Katherine Crowley, la psicoterapeuta que escribió el libro al lado de Kathi Elster, su asociada en una asesora de la ciudad de Nueva York.
"Esa conducta, de administración exageradamente aprensiva, es común bajo la tensión. Ellos están horrorizados de cometer un fallo por el hecho de que no desean que pase nada que no sepan", afirmó Crowley a Reuters en una entrevista.
Asimismo está el jefe "que lo afirma todo" (que precisa siempre y cuando alguien lo escuche), el jefe "ido" (al que le importa poco el trabajo) y, asimismo común en los tiempos bien difíciles, el jefe "que cambia la reglas" (aquel altera sus ordenes y esperanzas por capricho).
"En instantes de tensión, un jefe titubeante se vuelve más titubeante. Vemos mucho de eso ahora", afirmó Crowley, quien escribió anteriormente con Elster 'Working With You Is Killing Me' ('Trabajar para ti me está matando').
Los lectores reciben formas de valorar qué género de empleados son, como un "autor" o bien un "observador", modelos basados en de qué manera reaccionan y de qué forma lidian con múltiples géneros de jefes. "No creo que absolutamente nadie verdaderamente lo haya analizado de esta forma. Verdaderamente deseábamos decir, 'Eseperen, la gente lleva su bagaje sensible al trabajo'", afirmó Elster.
"Dejad de inculpar siempre y en todo momento a el resto. Cuando comprenden sus necesidades, esperanzas y miedos, verdaderamente van a poder trabajar mejor con bastante gente diferente. No con todos, mas sí de una mejor forma", añadió.
Las autoras inventaron 4 pasos para solucionar un inconveniente con un jefe irritado: advertirlo, alejarse de él, despersonalizarlo, y manejarlo. Alejarse de él probablemente sea lo más bien difícil, afirmó Crowley.
"Cuando se tiene una situación bien difícil, hay algo en la naturaleza humana que nos lleva a solventarlo, a trabajar más duro sobre eso", aclaró Crowley. "Alejarse de ello es sobre tomar distancia sensible de la situación", añadió.